Entidades públicas y privadas suscriben acta intensión para conformar Comité de Conservación del río Yanuncay
La protección de las fuentes hídricas es prioridad para la empresa pública y privada en Cuenca; no solo porque de ellas se obtiene agua potable y energía limpia; también son un sinónimo de desarrollo para las comunidades que se ubican a las orillas de los ríos.
Este lunes 22 de marzo, ElecAustro, la Universidad del Azuay, ETAPA, los Ministerios del Ambiente y Agricultura, así como los GAD de Chaucha, San Joaquín y Baños suscribieron el Acta de intención para la constitución del Comité de Conservación de la Cuenca del Río Yanuncay.
Francisco Salgado, rector de la UDA, destacó la importancia de la creación de este Comité, ya que será este el que tome las decisiones necesarias para adoptar las previsiones cuando exista escasez o exceso de agua en el río Yanuncay.
“Históricamente, el Yanuncay nos tiene en alerta, no solo a los sectores donde se registran desbordamientos, sino en las parroquias Chaucha y San Joaquín, donde se ha llevado puentes, destruido cultivo y ha causado daños en sus crecidas”, indicó Salgado.
Para Salgado, la conformación de este Comité es de vital importancia, ya que así se consolidarán proyectos de carácter educacional y productivo que la Universidad ya está implementando en esta zona.
El gerente de ElecAustro, Antonio Borrero, coincide en la necesidad de consolidar este Comité como ocurre en la cuenca del Machángara donde el beneficio para los habitantes de las parroquias Checha y Chiquintad es evidente.
“Lo ideal es replicar el modelo exitoso del Machángara en todos los ríos de Cuenca, no solo en el tema de control de caudales, también en la réplica de los proyectos de riego, agroproductivos, viales, entre otros, que implementan los Comités con el apoyo de las empresas públicas y privadas que, como hoy se reúnen para trabajar por el futuro de la ciudad”, indicó Borrero.
Una de las parroquias que al momento ya es parte de estos proyectos es Baños; Luis Guamán, presidente del GAD, señala que los beneficios son evidentes. “Son alrededor de 40 kilómetros que estarán monitoreados y si a eso le sumamos la participación de la comunidad, sin duda existirá un beneficio para toda la ciudad”.